Informe revela cómo la producción animal intensiva pone en riesgo la salud pública y el futuro del planeta
No hay futuro en granjas industriales
Los 5 peores impactos de las granjas industriales en la salud pública
En el Día Mundial de la Salud, World Animal Protection lanza un nuevo informe que pone al descubierto los impactos más dañinos para la salud humana relacionados con la ganadería industrial y cómo estos solo empeorarán a medida que la demanda de carne siga creciendo en todos los rincones del mundo.
El último informe de World Animal Protection, Los impactos sanitarios ocultos de los sistemas industriales de producción animal, expone cómo los gobiernos de todo el mundo están haciendo la vista gorda ante el costo de salud pública de la cría industrial, así como el sufrimiento de miles de millones de animales de granja.
Para 2030, se prevé que el consumo de carne crezca un 30% en África, un 18% en Asia Pacífico, un 12% en América Latina, un 9% en América del Norte y un 0,4% en Europa. Esta creciente demanda hace que miles de millones de animales estresados sean mutilados y confinados en jaulas o corrales estrechos y estériles durante toda su vida. Más del setenta por ciento de los 80 mil millones de animales terrestres criados en todo el mundo son criados y sacrificados cada año dentro de crueles sistemas de cría intensiva, conocidos como granjas industriales.
Desnutrición y obesidad
Las granjas industriales han desplazado la producción local y sostenible de alimentos. La tierra se utiliza para sembrar cultivos para alimentar a los animales de las granjas industriales, no a las personas, lo que socava la nutrición y la seguridad alimentaria. Al mismo tiempo, los altos volúmenes de carne barata producida en granjas industriales equivalen a un consumo excesivo de carne, uno de los cuatro principales factores de riesgo de enfermedades crónicas.
Jacqueline Mills, Gerente de Campañas de World Animal Protection, dice:
Las granjas industriales nos enferman. En apariencia los productos como la carne, el pescado y lácteos provenientes de granjas industriales parecen baratos, pero nos están costando a nuestra salud y a los gobiernos miles de millones de dólares cada año para limpiar el daño causado.
Necesitamos romper el ciclo de sufrimiento en nuestro sistema alimentario. El apoyo de los gobiernos a la carne barata equivale a más animales que sufren en crueles granjas industriales. Ha llegado el momento de que los gobiernos se centren en mejorar la salud de las personas, los animales y el planeta.
No hay futuro en las granjas industriales. Necesitamos una moratoria sobre la cría intensiva. La industria alimentaria debe adoptar un futuro humano y sostenible en el que consumamos dietas predominantemente basadas en plantas, y los animales de granja restantes se mantengan en sistemas de genuino bienestar donde puedan tener una buena vida.
Se necesitan cambios sistémicos para lograr los mayores beneficios para la salud de las personas. Algunos de ellos incluyen reorientar los subsidios de la agricultura industrial hacia prácticas humanas y sostenibles, apoyar los esfuerzos para reducir significativamente la producción y el consumo de carne y lácteos en países con un alto promedio de consumo por persona, mejorar la asequibilidad de los alimentos de origen vegetal y brindar apoyo para la transición de los agricultores que ya no desean dedicarse a la agricultura industrial.
Para hacer estos cambios realidad, World Animal Protection está pidiendo a los gobiernos de todo el mundo que impongan una moratoria en las granjas industriales e introduzcan y hagan cumplir estándares más altos de bienestar animal en la producción.