Seeing 'Meat Animals' as Living Beings, Not Mere Products

El Oceanogràfic censura un aluvión de comentarios en sus redes sociales

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El Oceanogràfic mantiene en cautiverio, condenados a una vida de sufrimiento a 18 delfines y dos belugas, encarcelados con el solo propósito de entretener a los turistas y alimentar un negocio millonario.

Valencia, 14 de junio de 2023 - Como respuesta al aluvión de críticas que el Oceanogràfic de Valencia ha recibido en los últimos días por tener encerrados a delfines para entretener a turistas, el autoproclamado como mayor acuario de Europa, ha decidido eliminar la totalidad de comentarios en al menos 4 de sus posteos en Instagram y suprimido la posibilidad de comentar de los cibernautas en esas publicaciones.

Oceanografic censura mensajes

El Oceanogràfic mantiene en cautiverio, condenados a una vida de sufrimiento a 18 delfines y dos belugas, encarcelados con el solo propósito de entretener a los turistas y alimentar un negocio millonario. Pero cada vez son más las personas conscientes indignadas con el lavado de imagen que el Oceanogràfic pretende hacer de su actividad. El Oceanogràfic promueve su supuesta labor de conservación, investigación y educación sobre la biodiversidad del medio marino, mientras retiene a una veintena de cetáceos en tanques cerrados para utilizarlos en espectáculos circenses hasta 3 veces al día. Un encierro inaceptable, inmoral e incompatible con el bienestar de estos animales.

En los últimos meses, desde que World Animal Protection España lanzó una campaña el pasado marzo para instar al Oceanogràfic a convertirse en un ejemplo y acabar con los espectáculos con delfines, las voces críticas con el acuario, símbolo de la ciudad de Valencia, no han dejado de escucharse. Más de 27.000 personas han firmado ya la petición para exigir al Oceanogràfic que deje de hacer negocio a costa del sufrimiento de los delfines y cientos de de simpatizantes han manifestado su indignación a través de comentarios en redes sociales, mediante mensajes directos a través de la página web del Oceanogràfic o reseñas en Google destapando la atrocidad que mantiene el Oceanogràfic con los delfines.

Los ciudadanos han dejado ya así decenas de mensajes para desmontar las tesis del Oceanogràfic, que bajo argumentos totalmente cuestionables, sigue queriendo ofrecer una imagen simpática y de compromiso con la naturaleza que no se sostiene.

Oceanografic censura mensajes

Por su parte, World Animal Protection envió el pasado 8 de junio, Día Mundial de los Océanos, una carta a la dirección del Oceanogràfic para transmitirle el descontento de la opinión pública y la exigencia de miles de personas para que acabe con su circo de delfines. A continuación se incluye una tabla de los argumentos utilizados por el Oceanogràfic versus la realidad. Estos demuestran los motivos de la indignación hacia el Oceanogràfic, un acuario que hasta ahora ha contado con un buen prestigio y reputación.

El Oceanogràfic dice…

La realidad es que…

El bienestar de todos los animales mantenidos en nuestras instalaciones es nuestra prioridad.

Condenar a los delfines a pasar toda su vida encerrados y apiñados en un recinto inhóspito y utilizarlos para realizar trucos con el fin de entretener a los turistas es incompatible con el bienestar de estos animales tan inteligentes. Ya sean criados en cautiverio, capturados en sus hábitats o transferidos desde otros centros, los delfines que viven en cautiverio solo pueden aspirar a una vida de sufrimiento: son entrenados mediante la privación de alimentos, agrupados de manera antinatural, y sufren la traumática experiencia de la separación temprana entre la madre y la cría. 

Nuestro compromiso social es aportar nuevo conocimiento, informar y sensibilizar, con la finalidad de mejorar la conservación de las especies y su hábitat natural.

 

Nuestro tres pilares son:

  1. La conservación
  2. La investigación
  3. La educación

 

 

 

 

  1. Mantener delfines en cautividad no ofrece ningún beneficio real para su conservación. Los 18 delfines que el Oceanogràfic mantiene en cautividad son delfines mulares, que no son una especie en peligro de extinción a nivel global. Además, el Oceanogràfic se dedica a la cría en cautividad para mantener o aumentar su población cautiva para sus espectáculos, no para aumentar las poblaciones de cetáceos en libertad en su hábitat natural. 
  2. Observar delfines en cautividad no permite conocer mejor a estos animales. Es imposible hacerse una idea sobre el comportamiento de un delfín estudiándolo en cautividad, ya que su vida no tiene nada que ver con la que tendría en su estado salvaje. El entorno, el espacio y la complejidad de estímulos que le proporciona su hábitat natural quedan suprimidos totalmente en cautiverio. Los delfines no son embajadores de su especie en libertad, tal como sostiene el Oceanogràfic, ¡son prisioneros!

 

  1. No se puede educar en valores a las nuevas generaciones mostrándoles la explotación que se hace de animales con fines de entretenimiento. Observarlos en cautiverio no enseña a protegerlos, pues no se puede enseñar a proteger una especie mientras se condena a algunos ejemplares a una vida de sufrimiento. 

    

Si aún no has firmado nuestra petición exigiendo al Oceanogràfic que se comprometa a poner fin al cautiverio de delfines participa haciendo clic aquí.

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