¿Qué es la ética animal?

¿Qué es la ética en los animales?

La ética animal usa el pensamiento crítico, la lógica, la emoción y la razón para determinar nuestra visión del mundo con relación al trato de los animales. Estudia y discute sobre la responsabilidad que, como humanos, tenemos frente a los derechos de los animales.

Este debate ha generado diferentes posturas y corrientes de pensamiento que resumiremos más adelante. La mayoría de ellas cuestionan, sostienen y/o defienden el concepto de sintiencia animal y el rechazo a la discriminación de los animales.

La conversación sobre los derechos animales y el papel que juegan en el entramado moral ha sido tema de reflexión desde hace siglos. Sin embargo, en las últimas décadas ha cobrado relevancia gracias al despertar colectivo que ha permitido ampliar nuestra conciencia social en general, y nuestro compromiso moral hacia la protección de los animales en particular. 

¿Qué diferencia hay entre ética animal y moral?

La moral o la toma de decisiones morales se relaciona con capacidades cognitivas complejas; por eso se le atribuye, principalmente, al ser humano. 

Un elemento central de muchos marcos éticos es el de “agentes morales” versus “pacientes morales”. 

Agentes morales y pacientes morales

Los agentes morales son capaces de razonar moralmente, mientras que los pacientes morales son aquellos seres que tienen derecho a nuestro cuidado y consideración moral. 

Todos los agentes morales son también pacientes morales; por ejemplo, los seres humanos somos capaces de razonar moralmente y tenemos derecho al cuidado y la consideración moral de los demás. Los pacientes morales, por otra parte, no siempre son agentes morales, como es el caso de los bebés, los seres humanos con discapacidades graves y los animales.

La posición histórica que argumenta que los animales no pueden tener intereses moralmente relevantes, pues no son capaces de tener experiencias, se debilita en estos tiempos, incluso en el ámbito científico.

Los animales son seres sintientes

Es indiscutible que los animales son seres sintientes. Así lo demuestran estudios que observan la conducta animal. 

Otras evidencias científicas revelan que ciertos animales —entre ellos, los primates, los cetáceos y los elefantes— son capaces de sentir emociones y tener experiencias morales como la empatía, la compasión o la tristeza.

Moral y sintiencia animal: ¿Tienen moral los animales?

Una investigación reciente realizada por dos filósofas europeas en la Universidad Veterinaria de Viena, revela que sí. Y ese es sólo uno de los cientos de estudios que dan fe de la sintiencia animal y la inteligencia emocional de los animales.

Aunque aún queda mucho por hacer, la sociedad está evolucionando en sus actitudes hacia los animales. Durante largo tiempo, fue una creencia común que no teníamos obligaciones directas con los animales. Es decir, no les debíamos nada; nada de lo que les hacíamos estaba mal. ¡Hoy al fin avanzamos en una dirección positiva! Se están manteniendo conversaciones más profundas sobre el bienestar animal. Esta es la esencia de la ética animal.

La ética animal nos hace cuestionarnos el trato que les demos a los animales. En la imagen delfines cautivos usados para entretenimiento turístico.

¿Qué dice la ética sobre los derechos de los animales? Diferentes posturas. 

Así como hoy ya existe una amplia conciencia social sobre derechos civiles y se han dado importantes conquistas en la igualdad y la no discriminación por género, orientación sexual o color de la piel, ¿por qué todavía muchas personas ignoran el conflicto en el ámbito de los derechos de los animales Esta es una deuda pendiente para con los seres sintientes no humanos.

La ética contemporánea aborda este problema desde diferentes ángulos, unos convencionales y otros más novedosos. Veamos algunas corrientes de pensamiento influyentes.

Marcos convencionales

Antropocentrismo y especismo

El antropocentrismo es una teoría que sostiene que los humanos somos los únicos seres moralmente considerables. El antropocentrismo constituye una forma de especismo, ya que nos favorece de manera injustificada por encima del resto de los animales.

Utilitarismo

El utilitarismo enfatiza hacer lo mejor para el “bien mayor” y, al mismo tiempo, minimizar el sufrimiento siempre que sea posible. Esta postura da igual consideración al sufrimiento de todos los individuos sintientes, incluidos los animales. Los utilitaristas no se oponen a todo uso de animales por parte de la sociedad, pero argumentan que nuestro trato actual hacia los animales es moralmente incorrecto porque resulta en un tremendo sufrimiento animal para casi ningún “bien mayor”.

El movimiento por el bienestar animal surgió del utilitarismo, con Peter Singer como figura principal. Los utilitaristas suelen ser antiespecistas, preocupados por minimizar el sufrimiento de los animales y creen que todos los individuos sintientes son iguales.

Deontología

La deontología es similar al utilitarismo. En esencia, cuestiona si la moralidad tiene sus raíces en una acción en sí o en las consecuencias de dicha acción. Los deontólogos enfatizan que un buen fin no justifica un mal medio y creen que los animales tienen un “valor inherente”  equivalente al de los humanos.

El movimiento por los derechos de los animales surgió de la deontología, con Tom Reagan como figura destacada, quien sostenía la teoría del especismo en el trato desigual hacia humanos y animales. Además, los animales tienen derechos porque son “sujetos experimentadores de una vida”.

Los deontólogos consideran que estos derechos son legalmente exigibles y violados cuando los animales son explotados por humanos. Con ese fin, Regan (y otros activistas por los derechos de los animales) solicitaron la abolición total del uso de animales en la sociedad: agricultura, investigación, etcétera.

Marcos no convencionales

Enfoque de capacidades

El enfoque de capacidades, fundado por la filósofa Martha Nussbaum, es menos conocido que otros marcos, pero está ganando popularidad. Es un conjunto de principios políticos expresados ​​como un conjunto de derechos fundamentales. Inicialmente se desarrolló para abordar la opresión de las mujeres en la sociedad y se ha adaptado para pensar las obligaciones humanas hacia otras especies.

El enfoque de capacidades de los animales busca incluirlos como sujetos primarios de justicia. Describe las muchas capacidades que todos los animales deberían cumplir: vida, salud, autonomía e integridad corporal, sentidos, imaginación y pensamiento, juego y razón.

Ética de las Virtudes

Los especialistas en ética de las virtudes evalúan las acciones por medio de vicios y virtudes. Una virtud es un rasgo bueno o digno de elogio; un vicio es un rasgo malo o despreciable. La ética de las virtudes, toma prestado lo mejor del utilitarismo y la deontología, tiene en cuenta lo que minimizaría el sufrimiento y lo que violaría un derecho. 

Pero eso es sólo una parte del discernimiento. También considera el contexto y lo que es más compasivo, justo o amable dadas las circunstancias. Si te hacen una pregunta hipotética y tus respuestas suelen ser “¡bueno, depende!”, es posible que seas especialista en ética de las virtudes.

Únete a la lucha por los derechos de los animales

Ahora que sabes más sobre ética animal, tal vez hayas cambiado tu forma de pensar sobre los animales o le hayas puesto un nuevo nombre. Una cosa es segura: el sufrimiento animal importa y debe terminar.

A la hora de decidir cómo actuar, piensa que no somos los únicos individuos a quienes debemos tener en cuenta. 

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